Actualización (13-Diciembre-2020): En la sección ofertas iré añadiendo aquellas que me parecen interesantes al tratarse de productos con una buena relación calidad/precio.
La situación excepcional en la que nos encontramos debido a la pandemia de COVID-19 ha obligado a muchas empresas a establecer el teletrabajo como medida para minimizar la movilidad de sus empleados.
La Universitat Politècnica de Catalunya también ha tenido que adoptar esta medida y muchos PAS han tenido que acondicionar un espacio en su casa para trabajar de forma remota o, como dicen los anglosajones, Work from Home (WFH).
Este hecho ha significado un incremento de las consultas sobre qué portátil es el más recomendable para poder hacer teletrabajo que ya me hacían habitualmente. Por este motivo, he creído conveniente resumir en este post la información más relevante para elegir correctamente.
El “despacho” en casa
Cuando una persona comienza a trabajar desde casa, lo primero que suele hacer es leer la normativa sobre el teletrabajo disponible en la web del Servicio de Desarrollo Profesional y, a continuación, instalar las herramientas necesarias siguiendo las instrucciones disponibles en la web de los Servicios TIC de la universidad.
Ahora bien, un aspecto muy importante para afrontar el teletrabajo, sobretodo durante un estado de confinamiento, es revisar la ergonomía del “despacho” o espacio de trabajo que se tendrá en casa siguiendo las recomendaciones disponibles en la web del Servicio de Prevención de Riesgos Laborales.
Lo más habitual es que se decida comprar un portátil porque el espacio disponible es pequeño o porque así se tiene más libertad de movimiento. Es en este punto cuando surge las preguntas “clásicas”: ¿Qué portátil me compro?, ¿Cuánto me tengo que gastar?, etc.
Intentaré responder a éstas y otras preguntas explicando algunas de las variables más importantes a la hora de elegir un portátil.
Medida de la pantalla y peso
Estas variables influyen mucho en la movilidad de un equipo. No es lo mismo un portátil de 12” y alrededor de 1,2 kg que un portátil de 17” y 2,8 kg o más.
El primero es un equipo ideal para llevarlo arriba y abajo pero tiene una pantalla pequeña no muy recomendable para trabajar con ella durante muchas horas seguidas. En cambio el segundo tiene un buen tamaño de pantalla pero llevarlo arriba y abajo cada día puede ser un incordio.
Además, dadas las mismas características hardware de un portátil (procesador, memoria RAM, tipo de almacenamiento, etc.), lo más habitual es que un equipo muy ligero tenga un precio mucho más elevado que un equipo más grande y pesado. Los primeros utilizan metales ligeros y componentes más compactos y específicos que son más caros que los materiales plásticos y componentes más estándares de los segundos.
Pantalla externa
Si se elige un equipo ligero y compacto (entre 12” y 14”) es muy recomendable conectarlo a una pantalla externa para poder trabajar más cómodamente.
A la hora de comprar una pantalla externa hay que tener en cuenta el tipo de conexión del portátil. Los portátiles “antiguos” únicamente disponen de conexión VGA o DVI. Los actuales suelen tener HDMI o Display Port (DP).
Una pantalla de 24” con resolución Full HD (1920x1080) y conexión HDMI o DP es suficiente para utilizarla como pantalla principal.
Por ejemplo: Philips 243V7QDSB/00, 24” IPS LED, Full HD [99€ en Amazon, 07/11/2020]
Teclado y ratón
Por ergonomía, es recomendable utilizar un teclado y un ratón externos en lugar de trabajar con el teclado y trackpad del portátil.
Se recomienda buscar una combinación de teclado y ratón inalámbricos que funcione con un único receptor para no ocupar más puertos USB de los necesarios.
Por ejemplo: Logitech MK295 [29,98€ en Amazon, 07/11/2020]
Panel y resolución de la pantalla
En el mundo de los portátiles hay mucha variación en la construcción de las pantallas que pueden influir a la hora de elegir un modelo u otro:
- Tipo de panel (IPS, TN, etc.)
- Tecnología (LCD, LED, etc.)
- Acabado (mate, glossy, táctil, etc.)
- Resolución (Full HD, 2K, 4K, etc.)
- Reproducción del color (RGB, Adobe, etc.)
A día de hoy, la mayoría de paneles tienen bastante calidad y el hecho de elegir uno u otro es más cuestión de gustos o del uso que se hará del portátil:
- Acabado mate si se trabaja en un entorno con bastantes reflejos (luz de fluorescentes, ventanas con luz directa, etc.)
- Buena reproducción del color en el espacio Adobe si se usará para retoque fotográfico
- Etc.
Una apuesta segura es escoger una pantalla con panel IPS ya que éstos tienen una buena calidad, una buena reproducción del color y un ángulo de visión amplio.
A día de hoy, lo más normal es elegir un portátil que tenga una pantalla con resolución Full HD (1920 x 1080). No es recomendable elegir un portátil con una pantalla de menor resolución. Las resoluciones 2K o 4K únicamente son recomendables en portátiles con pantalla de 15” o más.
De todos modos, hay que valorar el tamaño de la letra a esta resolución. Si ésta es muy pequeña y no se lee bien, el cambio de escala a 125% o 150% puede hacer que algunas aplicaciones no se muestren correctamente.
Procesador, memoria y almacenamiento
De estas variables, la más importante es el procesador ya que es un componente que no se podrá cambiar fácilmente por estar integrado en la placa base del portátil.
A la hora de elegir un procesado hay dos grandes fabricantes en el mercado: Intel y AMD. Históricamente el mercado de portátiles ha sido dominado por Intel pero, en los últimos años, AMD ha introducido procesadores bastante competitivos y eficientes.
¿Cuál es el mejor? ¿Cuál hay que elegir? No hay una respuesta sencilla a estas preguntas y los gustos personales o las ofertas existentes en cada momento decantan la balanza hacia uno u otro.
A día de hoy se puede escoger entre los siguientes procesadores:
- Intel i3, i5 y i7: se recomienda que sean de 9ª generación o superior ya que tienen un menor consumo y, por lo tanto, una autonomía mayor de la batería
- AMD Ryzen 3, 5 y 7: los de 3ª generación son los más eficientes a día de hoy
Cuando hay que elegir entre varias ofertas de portátiles “similares”, una opción muy recomendable es comparar el rendimiento y el consumo del procesador en páginas web especializadas:
Memoria RAM
A día de hoy, 8GB de RAM permiten trabajar cómodamente con los mayoría de programas ofimáticos (Office, Adobe, etc.), navegar por Internet y realizar conferencias web (Meet, Zoom, etc.).
Si el portátil también se usará para editar fotografías o vídeos, desarrollar aplicaciones o ejecutar máquinas virtuales , es recomendable que tenga 16GB de RAM o más.
Un aspecto a tener en cuenta a la hora de elegir un portátil, pero sin obsesionarse, es que la memoria del equipo se pueda ampliar en el futuro. Por ejemplo, si se compra con 8GB de RAM y tiene un slot libre, en el futuro se podrán colocar 8GB más para llegar a los 16GB de RAM.
Almacenamiento
En relación al almacenamiento, a día de hoy lo más importante es evitar los discos duros mecánicos (HDD) y es escoger equipos que tengan discos de estado sólido (SSD) ya que son mucho más rápidos y eficientes energéticamente.
Este elemento es una de los principales factores de las diferencias de precio entre ofertas “similares”. Todavía es muy común encontrar equipos que se venden con mucho almacenamiento (por ejemplo 1TB) pero usando discos duros mecánicos.
Lo habitual, hasta no hace mucho, era encontrar equipos con discos SSD pequeños (por ejemplo 256GB). Afortunadamente ésto está cambiando y cada vez es más fácil encontrar ofertas con discos SSD más grandes (por ejemplo 512GB o 1TB).
Los discos SSD pueden ser de tipo SATA (los más comunes de 2,5”) o de tipo NVMe (los más modernos, pequeños y rápidos).
Algunos equipos de gama media integran un disco NVMe con una capacidad pequeña pero muy rápido para el sistema operativo y los programas y un segundo disco HDD mecánico con mucha capacidad pero más lento para los datos (documentos, fotos, videos, etc.).
Aunque se recomienda elegir un portátil con disco NVMe, todo dependerá de la oferta concreta (precio, capacidad, etc.) y no hay que preocuparse excesivamente porque los discos suelen ser uno de los componentes más fáciles de cambiar en un portátil.
Tarjeta gráfica
La mayoría de procesadores Intel para portátiles incorporan una tarjeta gráfica integrada (HD o Iris Plus) que es más que suficiente para un trabajo ofimático.
Si se necesita más potencia gráfica (para edición de fotografía/vídeos o para jugar de vez en cuando) hay que buscar equipos que tengan una tarjeta gráfica discreta (NVIDIA GeForce o AMD Radeon).
Aunque no se vaya a jugar o a editar fotografías/vídeos, ante una oferta similar en características y precio se recomienda elegir la opción con tarjeta gráfica discreta ya que dará más flexibilidad de cara al futuro.
Sistema Operativo
Lo más habitual es encontrar equipos con Windows 10 Home instalado aunque, en ocasiones, es posible comprarlos sin sistema operativo o con el sistema operativo Linux.
La ventaja de comprarlo con Windows 10 instalado es que no habrá que preocuparse por los controladores del hardware del equipo ya que éstos vendrán preinstalados de fábrica.
Una posible desventaja, además del incremento de precio, es que también se hayan instalado programas de prueba o trial (como antivirus o suites de ofimática) que es recomendable desinstalar antes de comenzar a trabajar con el equipo para que no consuman recursos.
Si el equipo se vende sin Windows (o sin Office) no hay que preocuparse excesivamente. Existen páginas web donde se pueden comprar licencias de Windows y Office OEM a precios reducidos.
- Windows 10 Home OEM ~14€
- Windows 10 Pro OEM ~16€
- Office 2019 Professional Plus ~46€
Nota: Este tipo de licencias suelen servir para un único equipo y, aunque algunos medios las promocionan, otros indican que no son legales.
Windows 10 se puede descargar desde la página web de Microsoft y se puede usar la herramienta de creación de medios MediaCreationTool20H2.exe
para generar una llave USB de instalación del sistema operativo.
Windows 10 y Microsoft Office también se pueden descargar desde la página web de Distribución de Software de la UPC. Es necesario consultar con ATIC si es posible instalarlo en un equipo personal ya que ésto puede variar según el contrato con Microsoft que se tenga en cada momento.
Marcas y modelos
La elección de una marca o modelo es algo que muchas veces se basa en los gustos personales y las experiencias pasadas. Todas las marcas tienen equipos que son muy buenos y equipos que no lo son tanto. Hay gente que odia una marca y gente que la compraría con los ojos cerrados.
Ahora bien, para que tengáis una idea, marcas como HP y Lenovo tienen una gama de consumo muy equilibrada y de estética sobria y sencilla. En cambio marcas como MSI, Acer o ASUS tienen muchos equipos con una estética más atrevida o gamer.
El consejo principal es mirar primero las especificaciones y características del equipo y después fijarse en su forma, color, etc. Aunque para gustos, los colores (nunca mejor dicho).
Actualmente se pueden encontrar ofertas por menos de 500€ pero hay que fijarse muy bien y ser consciente que es un presupuesto algo ajustado para un portátil moderno. Seguramente se tendrá que sacrificar en algunos aspectos (la pantalla, la conectividad, las dimensiones o el peso) y centrarse únicamente en otros (el procesador, la memoria RAM y capacidad del disco).
Nota: A veces es interesante revisar las ofertas de equipos a punto de ser descatalogados ya que pueden tener unas especificaciones suficientes y precios interesantes.
Una posible clasificación de los portátiles en función de su precio y el uso podría ser la siguiente:
Nota: Los equipos indicados son únicamente un ejemplo de cada clasificación y no una recomendación de compra.
- Básico (menos de 300€). Son muy económicos y suelen tener pantallas con resolución 1366x768, es decir que no son Full HD. Son funcionales para leer el correo, navegar por Internet y jugar a algún juego muy ligero. No son recomendables para realizar teletrabajo.
Por ejemplo: Lenovo IdeaPad 3 [299€ en Amazon, 08/11/2020]
- Ofimática (entre 300€ y 500€). Sirven para navegar por Internet, utilizar aplicaciones como Microsoft Office y ver videos o películas. Son algo mejores que los anteriores y, según la oferta y sus características, podrían ser suficiente para el teletrabajo.
Por ejemplo: HP 15s-eq0025ns [529,99€ en Amazon, 08/11/2020]
- Avanzados (entre 500€ y 700€). Suelen tener mejor rendimiento, mejor calidad de pantalla o incorporar una tarjeta gráfica discreta. Son una buena elección “todoterreno” para ofimática, programación, etc. Es lo que se recomienda gastar si se quiere que el equipo dure unos cuántos años.
Por ejemplo: HP 15s-fq1158ns [699,99€ en Amazon, 08/11/2020]
Por ejemplo: MSI Modern 15 A10M-088XES [729,99€ en Amazon, 08/11/2020]
- Potentes (más de 700€). Acostumbran a tener procesadores de gama alta y una mejor tarjeta gráfica por lo que permiten realizar edición gráfica, jugar a juegos modernos a una buena calidad gráfica, etc.
Por ejemplo: Lenovo Legion Y540 [999,99€ en Amazon, 08/11/2020]
Conclusiones
Lo más importante es tener claras las necesidades de cada uno, saber qué uso se le va a dar al portátil y establecer un presupuesto máximo.
A partir de aquí hay que visitar tanto tiendas físicas (si la situación lo permite) como tiendas online y fijarse en los precios, su evolucíon y las ofertas puntuales que puedan tener.
Una vez se haya decidido y se haya comprado el equipo, la suerte estará echada y únicamente quedará disfrutar del equipo que se haya elegido.
Espero que esta información os pueda ser de utilidad durante el periplo que supone la búsqueda del portátil perfecto con un presupuesto ajustado.
Un saludo.